Con el objetivo de hacer un repaso a la actualidad del sector, nuestro director general, Alberto Torroba, recibía en febrero a la revista Infopack, especializada en el sector del packaging y el etiquetaje industrial. Una conversación que sirvió para hacer balance de los últimos meses tanto desde el punto de vista del sector global, como de la situación de Argraf en particular.

Alberto Torroba recordaba cómo, a partir de mayo de 2021, Argraf vivió “una explosión de pedidos”. “Aún mantenemos la tendencia alcista, y me atrevería a decir que se prolongará durante todo el año, pero en este contexto internacional no puedo aventurarme demasiado”.

“Con la situación actual, realmente es muy difícil hacer una previsión para los próximos meses”, argumentaba Torroba aludiendo a la crisis de las materias primas y de suministros. “Nos estamos encontrando con que las empresas, incluso las bodegas, están sobreestocando por miedo a quedarse sin material. Nosotros, a pesar de que tenemos los almacenes llenos, hay cosas que no podemos fabricar porque el material que tenemos no es para ese trabajo”.

Sin embargo, tal y como explicaba, en estos últimos años, la industria de la etiqueta, y particularmente la del vino, ha sido un sector con una gran rentabilidad. Tanto es así que, según añadía el director general de Argraf, “ha salido fortalecida de la crisis de la pandemia y de ahí ha surgido un gran interés, que se refleja en las adquisiciones y concentraciones empresariales que se están produciendo ahora”.

“Vivimos un momento de tipos de interés bajo mínimos y una inyección ingente de dinero por parte de gobiernos europeos. Una mezcla explosiva para que, quien disponga de dinero, invierta en un mercado tan interesante como es el nuestro”. Aunque, según señalaba, la posición de Argraf nunca ha sido la de convertirse en empresa vendedora, sí podría estar interesada en comprar.

En cuanto a la visión de Argraf de cara a los próximos meses, ésta continúa siendo la misma que les ha llevado a convertirse en líderes mundiales: “nuestra estrategia siempre se ha basado en ir siempre hacia adelante, porque si te estancas, decreces”. Por ello, en estos últimos tiempos han implementado nuevas e importantes inversiones en maquinarias de impresión y acabados, como la realizada en 2021 cuando entró una nueva offset de bobina Miyakoshi o, unos meses después, la nueva semirrotativa MIDA, una MA350 plus “un equipo muy completo en acabado fuera de línea, con estampaciones, serigrafía, relieves, flexo y troquel”.

Próximamente, Argraf también recibirá una nueva Omet Xflex X6 de 430 mm, el cuarto equipo ya, prácticamente idéntico al anterior que entró hace un tiempo y que es una de las máquinas que soporta mayor carga de trabajo: “Siempre llena con tres turnos, muy productiva y de la que las etiquetas salen terminadas porque, con una sola pasada, se pueden aplicar diferentes sistemas de impresión y acabados en altas velocidades”.

Pero en Argraf no solo se está realizando inversión en maquinaria para mejorar y aumentar la productividad, sino que, también para este año, está prevista la instalación de más placas solares en la zona de tejados. Además, se estudiará de qué forma cambiar las tecnologías de secadores UVI a LED y se está colaborando activamente con proyectos de investigación en sostenibilidad para desarrollar una aplicación que permita parametrizar y hacer mediciones de huella de carbono para reducir costes e impacto ambiental.

El futuro, resume Torroba, “será tecnológico y sostenible”, y aunque este, por todo lo expuesto anteriormente, resulta incierto, “en Grupo Argraf seguimos apostando por las personas, la innovación y la calidad máxima en todos procesos para seguir creciendo y mantener la excelencia productiva”.